martes, 13 de julio de 2010

Ya no hay vuelta atrás

Hay algunas noticias a las que sencillamente jamás me podré acostumbrar a recibir. No es de juzgar, no es de criticar, vaya, no es si quiera de describir...no se si en algún segundo las pueda clasificar. No podré jamás entender qué puede orillarnos a tomar decisiones para las cuales no hay vuelta atrás. Existen instantes en los que decidimos alterar por completo el curso de nuestras vidas, instantes tan pequeños como los 1.3 microsegundos que ahora nos serán restados todos y cada uno de nuestros días, instantes menores a un pestañeo, al inicio de un suspiro. Pasamos la vida olvidándonos de ellos, olvidando que qué es la cotidianidad si no la sumatoria de estos perfectos e ínfimos instantes. Nos consideramos siempre tan aptos de hacer o deshacer en unos momentos...vivimos cometiendo errores porque al fin siempre tendremos otra oportunidad...sin embargo lo cierto es que muchas veces no es así. El tiempo que ya perdimos no lo habremos de recuperar...el tiempo incesante no deja de marchar, como juez perpetuo califica como falta hasta el más pequeño de nuestros errores...se muestra inmisericorde...el tiempo no perdona. En caso de poder volver a empezar, el tiempo que se escapó de tus manos ya no lo habrás de recuperar. Es en este sentido que ya no hay marcha regresiva. Si nuestras decisiones están directamente asociadas al avance del tiempo, más cuidado habremos de tener...porque para ellas ya no hay corrección ni vuelta atrás.

El tiempo es imparcial, es continuo, para todos avanza y para todos cesa, no se fija en estados anímicos o en pensamientos, no actúa conforme a creencias individuales, no se basa en emociones o circunstancias...el tiempo simple y llanamente se dedica a seguir...por siempre, quizás hasta algún fin...Dios sabrá.

Existen decisiones que jamás comprenderé, existen noticias que rehúso recibir tan regularmente que se conviertan en parte de mi diario vivir...mi deseo no es juzgar o intentar determinar, sólo comprender que hay decisiones tan profundamente ligadas al tiempo para las cuales ya no hay vuelta atrás...

"Efesios 5:16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos."