lunes, 30 de mayo de 2011

say wha?

No sé por qué pero tengo qué escribir...
Me estoy empezando a encontrar con muchas de mis fallas en el camino, y esto que debo hacer no las requiere. Es momento de sacar las cosas y expresarlas tal y como son.
Soy una personas sumamente compleja, y no lo digo presumiendo, no lo considero un atributo, sino un defecto. Muchas veces creo ser clara con lo que digo y no lo soy. Puedo ser muy crítica en muchos de mis juicios, y dura con ellos. Soy muy radical en lo que pienso, aunque no lo exprese algunas veces, otras sí; lo cual se ve reflejado en un amplio discurso de justificación, en momentos en los que quizás no lo amerite, pero siempre creo que debe discutirse lo que otros no creen que debe serlo...lo que me ha generado algunos problemas con mis papás.
Puedo ser muy voluntariosa. Algunas veces egoísta otras veces generosa sin sentido, soy muy voluble en esto. Siempre he creído que es importante no desperdiciar algún recurso, por lo que soy ahorrativa en muchas cosas...en verdad me duele desperdiciar lo que sea. Soy algo desordenada, el tipo de persona que siempre tiene cosas en la mano. Soy sumamente responsable. Soy romántica y algo cursi...o mucho quizás.
Contrario a lo que muchos creen, muchas de las decisiones que he tomado en la vida, cosas a las que me he negado, han sido por voluntad muy propia, por convicción. No creo en Dios, estoy convencida de Él. Le creo a Él. Mi fe está en proceso de desarrollo pero si hay algo que ha sido constante en mi vida ha sido Dios, es en muchos sentidos el eje de mi vida y mis decisiones, espero llegue a ser el centro por completo.
He comprendido que las cosas que no puedo resolver hablando, sí se resuelven orando. No creo poder cambiar el mundo, sé que lo puedo hacer, y no porque sea muy increíble, de hecho siempre he sido algo insegura, sino porque el Dios en el que creo es sumamente poderoso y capaz, poderoso y grandioso en todos los sentidos posibles. Creo y de eso si estoy segura que me quiere usar para cosas grandes, como a todos...no que todos lo quieran escuchar y hacerle caso...

Creo que la peor diligencia es la que no se hace, pero me cuesta mucho trabajo hacer las diligencias. Creo en el amor en toda su extensión, sé que existe y que se manifiesta de muchas formas. Creo en la infinita bondad y la perversidad y maldad continuas. Creo que ese hueco que todos tienen en su corazón sólo se puede llenar con Dios. Creo que no valoramos lo suficiente lo que tenemos y cuando lo perdemos ya lo tomamos en cuenta.

Creo que las peores decisiones se toman en los arranques de emoción. Lo que más me molesta de mí es hacer las cosas que no me convienen a sabiendas de que así es...

Tengo grandes problemas saliendo de mi zona de comodidad, pero QUIERO de verdad salirme de ella.

Aunque parece que no me importa, sí me importa...



sábado, 21 de mayo de 2011

Sobre los 27 decapitados y las tinieblas


http://www.abc.com.py/nota/asesinan-a-27-personas-en-guatemala/

“Nuestro único delito es ser pobres y buscar mejores oportunidades de vida” (María Consuelo Rodríguez de Mendoza, 2011)

Personas cuya única intención era facilitar la vida, tanto de ellos, como las de sus familias. En verdad su único crimen fue haber nacido pobres y tener que ganar cada una de las necesidades más que básicas del ser humano a costa del sudor, literal y muy abundante, de sus frentes. Murieron jornaleros, murieron trabajando, murieron buscando algo mejor en medio de un mundo que si en algo se esforzó fue en cerrarles las puertas, hasta el último de sus días. Murieron haciendo algo que tenían que hacer, no sabían mejor, murieron y dejaron viudas, y huérfanos. Murieron y ¿quién va a hacer algo al respecto?

Murieron y siguen muriendo…están en el continuo presente del eterno morir que ahora parece rodearnos. Murieron mientras nuestra compasión y capacidad de asombro se reducen de manera exponencial. Murieron y nuestra mente está tan cauterizada que parece que lo mismo nos da. Murieron y ¿qué vamos a hacer al respecto?

Podríamos intentar apelar al pasado bestial e instintivo del cual venimos, refugiándonos en aquellos recuerdos con el fin de justificar parcialmente las acciones que ahora nos rodean. Decir que así como los bárbaros arrasaban con tantas antiguas aldeas durante los principios de nuestra civilización, la violencia y bestialidad de alguna manera siempre han estado en nuestra sangre, nada más han mutado y se manifiestan de maneras diferentes con el paso del tiempo. Sin embargo, en ninguna manera eso justifica que tras tantos siglos de supuesto avance, con tantas leyes y modos de proteger los derechos humanos (que por default nos diferencian de los animales) no sólo sigamos haciendo esta clase de salvajismos (mucho peores que los animales, porque a la verdad ellos no saben más que vivir y actuar por instinto, por su pura naturaleza, sin razón alguna como parte de sus decisiones), sino que, lo peor, las estemos permitiendo y más aún, hayamos decidido ignorarlas y convivir con ellas.

Esta última cifra, estos 27, son una advertencia, el recordatorio, un mal, nefasto síntoma, de una descomposición que lleva generándose durante muchos años. Esta descomposición, esta falta de interés, esta injusticia continua, es el reflejo de lo dañados que estamos y que nos hemos permitido estar. Las luchas contra el narcotráfico llevan generando muertes y destrucción desde mediados del siglo pasado, estamos viendo claramente las cosechas de nuestra idiosincrasia, de nuestra falta colectiva de interés por el bien ajeno; nuestro egoísta y sumamente estúpida mentalidad de buscar el bien propio y alejarnos por completo de todo interés por el de al lado.

No puedo dejar de pensar en las familias que de ahora en adelante además de no tener a su proveedor, al hombre de su casa, que tan brutal y despiadadamente fue asesinado, tendrán que lidiar con la idea de ni si quiera poderse despedir, de velarlo y enterrarlo, hacer parte de su duelo, como era correcto, como era necesario. Más aún, lidiar con el faltante, el desasosiego, generado por lo absurdo y corrupto, descompuesto (quiero decir animal, pero no, porque los animales no hacen eso) final de sus amados.

Creo que aún no dimensionamos los daños generados por la inversión de papeles tan descabellada que ocurre frente a nuestras narices. Todos los niños que cada vez más temprano tienen que empezar a tomar acciones y hacer decisiones que definen el futuro de su familia, a causa de que su padre ha sido asesinado o ha tenido que huir por amenazas…no tiene sentido. ¿Cómo van a crecer? ¿Qué va a ser de ellos? ¿Quién podrá regresarles los años que tan injustamente les están siendo robados? Que una niña haya tenido que rogar por la vida de su madre, mientras su padre hacía lo mismo, para que por lo menos uno de los 2 resultara con vida y ellos no quedaran huérfanos…¿qué nombre hay para eso? ¿Cómo lo podemos definir? Una niña que va a ayudar a sus padres a trabajar, o por lo menos a acompañarlos para no quedarse sola, esperando que sea un día de tantos, y termina abogando por la vida de su madre y viendo como la de su padre se va entre sus dedos…porque él era merecedor de una muerte a la que nunca supo en qué momento fue sentenciado, pero lo fue, y eso ya nadie lo pudo cambiar.

Ya no tienes que estar metido en algo, ya no tienes que ser parte de un grupo u otro. Ya no tienes que tener dinero, ya no tienes que tener un gran nombre. No tienes que ser “trascendental” a nivel nacional, local…vamos puede que ni tu vecino sepa tu nombre, TÚ ya puedes ser sentenciado.

Basta con que trabajes para la persona incorrecta, con que existas, ya puedes ser sentenciado. Ya no hay discriminación. Antes parecía haberla, pero poco a poco, conforme nuestra ceguera y negligencia aumentaron, nuestra fatal indiferencia, también la indiscriminación de la violencia absurda lo hizo. Podemos catalogar la violencia de hoy en día como la máxima expresión del comunismo, pues todo lo que hace es para todo el pueblo, no distingue entre ricos y pobres.

Yo no tengo palabras para describir la magnitud de lo que, como sociedad, nos estamos echando encima. Más aún, de lo relacionado que está todo lo que hemos permitido que nos gobierne, nos rija, mande sobre nuestras tierras, con estas atrocidades. Quisiera intentar explicar el daño que hemos generado y cómo ya no podremos echarlo atrás. Los padres sin hijos, los hijos sin padres, las madres viudas y las familias destrozadas que ahora parecen estar en todas partes, siendo desplazados continuos de la violencia.

Creo que jamás alguien podrá, en verdad es inefable.

Sin embargo, me rehúso a quedarme así…me rehúso a que me maten a alguien más, a que la violencia toque a otro de mis seres queridos. Me niego a que una guerra, que en principio yo creí no era mía, vuelva a arrebatarme a otra persona de los brazos, me niegue la oportunidad de volver a expresarle mi afecto a alguien allegado a mi corazón.

Yo no creo que este mundo descompuesto sea si quiera un intento perverso del perfecto plan que un día Dios hizo para todos nosotros. A mí no me importa en qué creas tú, a mí no me importa en qué piensen los demás, ya llevo demasiados años fijándome en el qué dirán, y el qué dirán jamás mantuvo vivo a ninguna persona ni resguardó la vida de sus queridos…no. El miedo nunca ha guardado a una nación de la injusticia e iniquidad dentro de sus raíces, si algo, lo ha incrementado. Espero que si no crees en un Dios que es absoluta verdad por lo menos seas capaz de reconocer la completa oscuridad que continuamente te rodea, de una u otra forma. Y si puedes reconocer la oscuridad, más fácilmente podrás ver entonces la luz. “La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas NO prevalecieron en contra de ella”. Yo no voy a razonar, porque creo que la violencia e injusticia han anulado cualquier argumento válido y razonable delante de todos nuestros ojos.

El pecado existe, y su manifestación más popular actualmente es la violencia. El pecado es todo lo que va en contra de la voluntad de Dios. El pecado a Dios en sí no le puede hacer nada, sin embargo lleva destruyendo lo que le hizo desde el principio de nuestros días. “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios y el Verbo era Dios” “Y dijo Dios, hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza, y el hombre fue hecho”. Todo ha sido creado y constituido por la palabra de Dios. Con ella Dios nos hizo, sin ella nos morimos. En la palabra hay una explicación clara de lo que nos separa de Dios y es precisamente el pecado. Así como existe Dios existe Satanás. “El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor”. Así como Dios es amor, Satanás es el padre de la mentira que ha venido a “robar, matar y destruir”. Esa es toda su meta. No estoy abriendo un foro de discusión, estoy expresando lo que es. Su mejor engaño, siendo el padre de la mentira, es que él no existe. Adorar a Satanás no es siempre adorarlo a él, de hecho las raíces del satanismo, una moda más impregnada dentro de nuestra cultura de lo que creemos, están en hacer tu propia voluntad ("Do what thou wilt shall be the whole of the Law"). ¿Por qué hacer tú propia voluntad? No estamos en una lucha entre lo que el hombre quiere y pude hacer, lo que Dios quiere y puede hacer y lo que Satanás quiere y puede hacer. Dios es el alfa y la omega, el principio y el fin. Satanás existe desde antes de nuestra creación. El hombre, en contra de todo orgullo y vanidad que puedas tener amigo lector, lo cierto es que es nada en medio de esta batalla. Es nada en el sentido de que en sí mismo no tiene parte verdadera, porque al lado de ambas fuerzas es mínimo. O es influenciado por una fuerza o es influenciado por otra, no hay más. Tu voluntad o la rige Dios o la rige el diablo…eso es. Al promover que las personas hagan SU voluntad, exalten los deseos de SU persona, se dediquen a la autosatisfacción y autorealización, lo cierto es que están haciendo lo que Satanás quiere. Mientras TÚ voluntad no esté en Dios, está en Satanás, no hay más. Por eso el Satanismo no habla de adorar a Satanás, sino de adorar la propia voluntad de las personas. Satanás es el príncipe de este mundo, la autoridad original de este lugar recae sobre él, pues el hombre, a través del pecado original se la cedió por completo. Dios había puesto al hombre en la tierra para que la gobernara, cuando el hombre le transfirió ese poder a Satanás, de nuevo, porque lo obedeció a él y NO a Dios, Satanás adquirió todo ese poder.

Estoy segura de un Dios perfecto, un Dios cuyo amor y misericordia se renuevan todos los días, conocedor de cada uno de nuestros tiempos, hacedor de todas las cosas. Un caballero que es completamente fiel a Su palabra, por lo que jamás se meterá con TÚ voluntad. Podrás hacer de todo en esta vida, hasta pretender y decir que no existe, burlarte de quienes creen en Él y negarte a lo que para mí es más que evidente, Su existencia. Sin embargo, no puedes obviar la cantidad de barbaries, brutalidades y oscuridad general que nos rodean. Creo que las tinieblas en verdad no son más que la ausencia de luz.

1:5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.” (1 Jn. 1:5)

“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.” (Jn 1:1-5)

La vida era la Luz de los hombres, y creo al día de hoy lo sigue siendo. La luz en las tinieblas en verdad resplandece, de hecho necesitamos oscuridad para que la luz en verdad resplandezca. Creo que la luz siempre será superior a las tinieblas y que este presente absurdo puede ser destituido y sustituido por un futuro claro y justo, siempre que entendamos nuestro papel dentro de todo este conflicto. Entendamos que la luz de Dios se verá reflejada en los momentos de oscuridad en el hombre.

Yo ya no quiero razonar, porque la violencia y la guerra no lo hacen. Yo me cansé y entendí que en verdad el hombre sólo es grande cuando se humilla y está de rodillas. Yo necesito de Dios, necesito que Jesús, el Verbo de vida, la luz misma actúe en mí. Necesito que el Espíritu Santo deje de ser parte de un rezo y se convierta en el nexo entre mi vida y lo claro, lo que tiene luz, el exacto opuesto de las tinieblas.

Genuinamente y de todo corazón te invito a que hagas lo mismo. He oído que nos invitan a meditar y pensar todos los días a las 12 sobre nuestros mejores deseos para nuestra nación. Yo te invito a que ores por tu país, a que en verdad intentes acercarte a Dios, al Dios que te describo, no al que tú quizás has mal concebido a causa de la negligencia de muchos de los que creemos en Dios pero hemos sido torpes en nuestro andar, o al Dios de castigos y penalizaciones perpetuas que tantas veces nos han presentado. No veas a los hombres, no los busques, búscalo a Él. Él es la luz, en Él está la luz, y la luz es lo que necesitamos como nación…no más sangre, no más injusticia, no más oscuridad. Y sólo Dios en verdad lo puede hacer, ya está comprobado que los hombres siempre fallaremos en nuestro intento, por eso ya hemos perdido toda la fe en nuestros gobernantes: estamos esperando que rijan nuestra nación como sólo Dios a través de ellos podría bien hacerlo.

Romanos 10: 8b-10 “Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.”

No te digo que te comprometas con una iglesia, un movimiento, que te tatúes un nombre en el pecho o que tras hacer esto me mandes todo tu dinero, de ninguna forma…Dios no tiene precio y lo que Él tiene para la humanidad ha sido todo dado por gracia.

Busca a Dios, acércate a Él, llénate de lo que dice la Biblia, que finalmente es SU palabra. La misma fe ciega que has tenido en tantos seres humanos, empléala en ÉL, dale una oportunidad, es todo lo que necesita. En 3 oraciones reconoce que ha habido oscuridad en tu vida, porque no puedes abogar por luz sumergido dentro de oscuridad. Solicita el favor de Dios en ella, confiesa con tu boca que Jesús es el Señor y cree en tú corazón que Dios le levantó de los muertos, como dicen los pasajes antes mencionados.

Yo creo que Dios puede vencer toda oscuridad y toda injusticia que hay en tú vida. Yo creo que para Él nada puede ser posiblemente difícil. En verdad firmo que el que haga esto creyéndolo y con convicción necesariamente va a traer luz a su vida y a su nación, y eso es lo que todos necesitamos.